La historia de Makatea está marcada por 60 años de explotación minera de su subsuelo rico en fosfatos. Fábricas en desuso, gigantescos pozos de perforación: este pasado minero ha afectado profundamente a la isla. Visita la isla de Makatea y sumérgete en más de medio siglo de historia. Esta insólita isla del archipiélago Tuamotu, en la Polinesia Francesa, tiene un pasado singular.
Durante tu viaje a Las Islas de Tahiti, no pierdas la oportunidad de hacer una parada en esta tierra del fin del mundo. Disfruta de una experiencia cultural única, descubriendo una historia atípica. Solo hay una forma de llegar a Makatea: en barco, a través del puerto de Temao, al oeste. No hay aeropuerto en la isla. Esto hace que la visita a esta isla con sus numerosos acantilados sea aún más excepcional.
Desde hace algunos años, los escarpados acantilados se explotan con fines turísticos y deportivos. Ahora es posible escalar en un paisaje sublime, elevarse sobre el arrecife de coral y admirar el océano Pacífico. Pero antes de la llegada de estos lugares de escalada, esta isla era conocida por una actividad muy diferente: la minería de fosfato. Este proyecto tuvo lugar en la primera mitad del siglo XX. La minería llegó a su fin en la década de 1960.
Tras los pasos de la minería de fosfatos
Si vas a Makatea, lo primero que debes hacer es visitar el antiguo pueblo industrial y las ruinas de la mina de fosfato. Con sus locomotoras oxidadas y su central eléctrica cubierta de maleza, es un viaje al pasado. Sube a lo alto de un mirador y contempla los restos del antiguo puerto minero. Imagina la agitación en este atolón, donde la población se multiplicó por 100 en pocos años hasta alcanzar los 3000 habitantes. “Teníamos microondas cuando en Tahiti aún se utilizaban hornos tradicionales”, dicen los habitantes de Makatea, refiriéndose a la época de las minas de fosfato. Un periodo de prosperidad para la Polinesia Francesa.
Luego dirígete a las antiguas explotaciones mineras. Un desierto de agujeros llamado antaño : El Sahara. Es un verdadero paisaje lunar. Algunos cráteres tienen decenas de metros de profundidad, lo que provoca vértigo. Es mejor que mires por dónde pisas para no caer entre todas estas cavidades. El fosfato se extraía con pala y luego se transportaba en carretilla. Cuantas más carretillas hubiera, mayor sería la paga de los trabajadores. Otro hecho significativo: la extracción de fosfato propició el desarrollo del primer y único ferrocarril de Las Islas de Tahiti.
Naturaleza, deporte y cultura en Makatea
La historia industrial de este atolón es única en la Polinesia Francesa, pero hay muchas actividades aparte de las visitas turísticas para disfrutar durante tu estancia. Alojarte en una pensión te da la oportunidad de descubrir la cultura local. Ve a la caza del kaveu, el cangrejo del coco, y pruébalo en un plato tradicional tahitiano.
¿Te gusta la aventura? ¡Así que ponte el equipo de escalada y escala los vertiginosos acantilados de Makatea! Disfruta de las impresionantes vistas de la laguna turquesa y de la exuberante vegetación polinesia. Hay rutas para escaladores principiantes y experimentados. Para refrescarte después de una sesión deportiva, dirígete a una gruta para darte un baño fuera de lo común. Las Islas de Tahiti están llenas de sorpresas. Atrévete a visitar las Islas Tuamotu y prueba el turismo responsable.
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